Aunque ya hace un tiempo que se filtraron los datos suficientes para ver que Intel y AMD estaban planeando el lanzamiento de una inusual unión, la confirmación oficial llegó hace unos días con la publicación de algunas especificaciones y rendimientos por parte de las compañías afectadas.
Después del mal momento que atraviesa Intel debido a los problemas derivados de Meltdown y Spectre, y del buen momento de AMD tras el éxito de los chips incluidos en las consolas Xbox One X y PS4 Pro, la unión de estos dos gigantes no parecía probable. Pero ha llegado para disfrute de muchos gamers.
Todos sabemos que Intel es el mayor fabricante de procesadores del mundo pero que deja mucho que desear en cuanto a la cuestión gráfica. Aunque sus placas incluyen chips de memoria gráfica incorporada, si se desea reproducir contenido en 3D de calidad hay que recurrir a una tarjeta gráfica dedicada. Generalmente de la marca NVidia que ha copado el mercado con sus potentes GPUs. Por lo tanto, si vas a hacer uso de una gran carga de datos gráficos, ya sea para cargar un videojuego o un programa de visión artificial o para ejecutar un programa sobre una gran cantidad de imágenes y/o modelos, hasta la fecha, se necesitaba un PC de sobremesa con una potente tarjeta gráfica además de un buen procesador. Los portátiles quedaban prácticamente excluidos ya que las tarjetas gráficas ocupan bastante espacio y solo los de muchas pulgadas tienen un hueco para incluirlas en versiones reducidas.
Por contra, los chips con GPU para procesamiento gráfico lanzados por AMD para consolas, los Radeon RX Vega, han demostrado su calidad y alto rendimiento con juegos como Rise of the Tomb Raider.
Y como la unión hace la fuerza, o en este caso la velocidad, Intel y AMD han optado por unirse. AMD ha adaptado la serie Vega para poder integrarla en los nuevos procesadores de Intel de 8ª generación, Coffee Lake. La nueva mezcla se va a comercializar en dos modelos con cinco configuraciones en total. AMD aporta la Radeon RX Vega M en dos gamas, GH y GL, para cuatro procesadores i7 y un i5 de Intel. En la actualidad estamos esperando a que salga la oferta de portátiles con estas nuevas configuraciones. Pero si que podemos obtener un NUC (Next Unit of Computing) u ordenador de octava generación con las configuraciones Core i7-8705G con gráficos Radeon Vega M GL y Core i7-8809G con Radeon Vega M GH. Esta última el buque insignia de la unión.
Aunque las características del NUC i7-8809G a nivel de bus y otros aspectos no son las de un PC Coffee Lake como los que también está presentando Intel estos días, si que son muy superiores a un Kaby Lake (7ª generación), pudiendo alcanzarse un rendimiento similar al de un PC de sobremesa con una gráfica de gama alta para resolución de 1080p. Otra de las ventajas para gamers de el nuevo procesador es que se puede overclockear para aumentar la frecuencia y mejorar el rendimiento.
Esta unión empresarial parece en principio una muy buena noticia para los usuarios pero un duro golpe para NVidia. Cuando comiencen a comercializarse los primeros productos veremos hasta que punto la mejora es buena y accesible para los bolsillos. Estaremos pendientes.
Para leer más:
- https://www.forbes.com/sites/marcochiappetta/2018/03/30/intel-amd-hybrid-kaby-lake-g-processor-proves-powerful-in-first-real-world-evaluations/
- https://www.hobbyconsolas.com/noticias/asi-rinde-procesador-intel-i7-8809g-grafica-amd-integrada-197734
- https://www.adslzone.net/2018/01/02/specs-intel-i7-amd/
- https://www.pcworld.com/article/3267074/computers/intel-hades-canyon-nuc-nuc8i7hvk-review.html
