Como comentábamos hace poco, la empresa Microsoft esta redirigiendo la estrategia empresarial a medio y largo plazo. Dando de lado al mítico Windows y basándose en la nube (Azure), la inteligencia artificial (Cortana), y la computación cuántica, quiere rediseñar el presente.
Las dos primeras ramas de la reestructuración están claramente definidas, pero cuando Satya Nadella empezó a pensar en la tercera el panorama no era nada prometedor. Querían subirse a un tren que ya había salido hacia tiempo pilotado por la pelea entre IBM (IBM Q) y Google.
Para recortar terreno sondearon el panorama cuántico y vieron que las partículas de Majorana (fermiones que son sus propia antipartículas), analizadas por el Instituto Niels Bohr, podían ser el as bajo la manga que necesitaban. Estas partículas, por sus características intrínsecas, son capaces de crear de forma más sencilla qubits mucho más estables. Pero lo más importante es que estos nuevos qubits tienen considerablemente una menor tasa de error que los creados por los métodos que se están utilizando en la actualidad.
A nivel de software, Microsoft ha lanzado hace poco un kit para desarrollo. La computación cuántica se basa en unos patrones totalmente diferentes a los estados binarios de la computación que conocemos todos. Por esa razón han creado un sistema de simulación para que los desarrolladores puedan empezar a familiarizarse con estos nuevos procesos. El nuevo lenguaje de programación se ha bautizado como Q# y el kit de desarrollo como Quantum Dev Kit. Para empezar a trabajar con el, solo necesitamos una de las versiones actuales de Visual Studio o preferentemente un Visual Studio Code. Este ultimo es una versión del entorno de programación pero liberado como software libre para Linux y macOS. Otra de las nuevas tendencias de Microsoft, la integración con todos los sistemas.
Aquí os dejamos el enlace para la instalación de Quantum Dev Kit y pasos para seguir si trabajas en Linux.
El Quantum Dev Kit se integra perfectamente en los entornos de programación requeridos y solo queda empezar a pensar cuánticamente.
Referencias:
Pingback: Computación cuántica con acento español. - Fisicotrónica
Pingback: IonQ y la apuesta por el iterbio. - Fisicotrónica
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