Mira que teníamos ganas de ver si Barry-1 era capaz de generar movimiento útil en el espacio con alguno de sus dos novedosos motores cuánticos. Pero nos hemos quedado con las ganas tras descubrir que se ha perdido en el espacio.
Parece ser que, en la fase de lanzamiento, el bus de comunicaciones sufrió algún tipo de avería que no solo no se ha podido solucionar, sino que ha degenerado en una desconexión completa con los sistemas terrestres. Así lo comunicó Rogue Sapace System en su web. Dando por finalizada la misión sin poder haber obtenido los datos de test necesarios para analizar los motores cuánticos.
Dado que remarcan que esta ha sido su primera misión orbital, y que se encuentran inmersos en el análisis del problema de comunicaciones, esperamos que haya un segundo intento. Mientras tanto podemos seguir viendo a Barry-1 cumplir con su órbita, o la evolución de otros intentos de llegar a producir motores cuánticos útiles. Como el publicado por Álvaro Tejero, Daniel Manzano y Pablo Hurtado del Grupo de Física Estadística y de la Materia de la Universidad de Granada en Physical Review E.
